jueves, 16 de agosto de 2012

Prisión de Silencios


Madrugada que te asomas
látigo incandescente
en mis ojos, en mi boca
tiembla por dentro
recojo los pedazos
vuelvo a mirar 
hacia adentro
donde duele
lo que callo: 
prisión de silencios,
ciega de amor
embriagada de llanto
lo obscuro es lo claro
lo claro es lo obscuro
en este trayecto
llevo sólo una luz
que abrazo 
Silencio . . . 
un colibrí que anuncia
la vida que se abre
brilla el cielo,
y un respiro me devuelve
a mi conciencia
que permanecía dormida
en las tinieblas.


Leslie Aimee Hassey
16 / Ago / 2012